Hoy he leído un artículo en el que se decía que la expresión Carpe Diem está, generalmente, mal interpretada. Y estoy de acuerdo, porque a veces, "vivir el momento" se relaciona con vivir atropelladamente, vivir a tope, y para mí vivir el momento es vivir cada segundo saboreándolo, disfrutándolo, viviéndolo en el presente. A veces vivimos mucho más en el pasado o en el futuro, pero muy poco en el presente. Creo que un gran avance sería que todos fuéramos capaces no sólo de vivir el momento, sino también de saborearlo.
Hace poco encontré este poema de Horacio:
CARPE DIEM
No pretendas saber, pues no está permitido,
el fin que a mí y a ti, Leucónoe,
nos tienen asignados los dioses,
ni consultes los números Babilónicos.
Mejor será aceptar lo que venga,
ya sean muchos los inviernos que Júpiter te conceda,
o sea éste el último,
el que ahora hace que el mar Tirreno
rompa contra los opuestos cantiles.
No seas loca, filtra tus vinos
y adapta al breve espacio de tu vida
una esperanza larga.
Mientras hablamos, huye el tiempo envidioso.
Vive el día de hoy. Captúralo.
No fíes del incierto mañana.
Horacio
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